Tú eres Dios, el que deshace todo mal.
Tú eres Dios, el tesoro de quienes te anhelan.
Tú eres Dios, el que trata con las personas sencillas.
Tú eres Dios, el que perdona a quienes perdonan.
Tú eres Dios, el que solamente eres honrado por las personas humildes.
Tú eres Dios, el que es generoso con quienes son generosos.
Tú eres Dios, el que juzga a quienes juzgan.
Tú eres Dios, el amigo de los pequeños.
Tú eres Dios, el único bien de nuestros corazones.
Tú eres Dios, al que encuentran quienes te buscan.
Tú eres Dios, el que ilumina a los seres humanos.
Tú eres Dios, el que acoge al corazón arrepentido.
Tú eres Dios, el que habla a las personas silenciosas.
Tú eres Dios, el que rechaza el mal.
Tú eres Dios, el que consuela a los afligidos.
Tú eres Dios, el que bendice a quienes son fieles.
Tú eres Dios, el que se deleita estar con los hijos de los hombres.
Tú eres Dios, el que acoge a quienes acuden a ti.
Tú eres Dios, el tesoro inapreciable para quienes te encuentran.
Tú eres Dios, el que está siempre pronto a perdonar.
Tú eres Dios, la paz y el descanso de las personas mansas.
Tú eres Dios, la razón de nuestra fe.
Tú eres Dios, nuestra verdadera esperanza.
Tú eres Dios, la causa de nuestra alegría.
Tú eres Dios generoso.
Tú eres Dios, el que quiere que cada ser humano alcance la salvación.
Tú eres Dios, el que no ignora a quienes le piden en verdad.
Tú eres Dios: quienes te tienen, lo tienen todo.
Tú eres Dios, el que del ser humano reclame todo su corazón.
Tú eres Dios, el que obra con sencillez.
Conclusión:
Señor Dios, que nos creaste, nos redimiste
y nos mantienes vivos,nosotros somos tus siervos.
Te hemos elegido como Señor nuestro y no te cambiamos por nadie y por nada
porque ¿quién es como tú? Pedimos tu gracia, porque sin ti nada podemos hacer.
Amén.