También tengo otras ovejas que no son de este redil;
aquellas también debo traer, y oirán mi voz;
y habrá un rebaño, y un pastor.
(Juan 10:16)
Del 18 al 25 de enero celebramos una semana de oración por la unidad de las iglesias cristianas. Desde el principio, quienes se acercaban a Jesús pertenecían a una sola Iglesia, con el Papa como cabeza. Sin embargo, con el tiempo, algunas iglesias se separaron y ya no permanecieron dentro de la fe católica.
Jesús mismo deseaba que todos los cristianos estuvieran unidos. En la Última Cena, oró para que hubiera «un solo rebaño y un solo pastor». Por eso, esta semana se conoce como la «Semana Ecuménica«, un término derivado del griego que significa todo el mundo habitado. Es una semana dedicada a reflexionar sobre la importancia de fomentar la unidad entre los cristianos católicos, ortodoxos y protestantes; todos los cuales comparten la creencia en Dios Padre, Jesús el Hijo de Dios y el Espíritu Santo.
Consideramos a todos los cristianos como hermanos y hermanas en el Señor porque, más allá de nuestro reconocimiento compartido de Jesús como nuestro hermano, hay muchos elementos que nos unen. Entre ellos se encuentran la fe común, la celebración de los sacramentos, la sucesión apostólica y, sobre todo, el amor, que debe unirnos más como una sola familia.
Oremos con san Jorge Preca:
Señor Dios Padre, mira la viña que tu amado Hijo ha redimido con su sangre y bendícela con el rocío de tu gracia, para que crezca en número de fieles, en el amor a la buena enseñanza y en la verdadera paz y caridad. Confiados en tu misericordia, te ofrecemos el sufrimiento de tu Hijo, Cristo Jesús, que ha merecido tu gracia para toda la humanidad. Amén.