El Papa Francisco, en su carta Sobre el Papel de la Literatura en la Formación, publicada el 17 de julio de 2024, subraya el papel esencial que desempeña la literatura en la formación del alma y el intelecto humanos.
El Papa Francisco, en su carta Sobre el Papel de la Literatura en la Formación, subraya el papel esencial que desempeña la literatura en la formación del alma y el intelecto humanos. Comienza reconociendo la profunda influencia que las grandes obras literarias han tenido en los individuos y las sociedades a lo largo de la historia. La literatura, sostiene, es más que una simple forma de arte; es un medio a través del cual encontramos las profundidades de la experiencia humana, explorando temas de amor, sufrimiento, alegría y esperanza. Proporciona un espacio donde los lectores pueden abordar cuestiones fundamentales de la existencia, la moralidad y la espiritualidad.
El Papa enfatiza que la literatura tiene el poder de desarrollar la empatía al permitir a los lectores ver el mundo a través de los ojos de los demás, fomentando una mayor comprensión de diferentes culturas, perspectivas y experiencias. Este compromiso empático es crucial para construir una sociedad más justa y compasiva. Además, la literatura estimula el pensamiento crítico y desafía a los lectores a reflexionar sobre sus propias creencias, valores y suposiciones. Les invita a cuestionar el status quo e imaginar nuevas posibilidades para el futuro.
El Papa Francisco también destaca la importancia de la literatura en la formación espiritual y moral de las personas. A través de historias y personajes, la literatura puede inspirar a los lectores a buscar la virtud, la sabiduría y una relación más profunda con lo divino. Pide a educadores, padres y líderes que promuevan la lectura de literatura de calidad como medio para fomentar el crecimiento moral e intelectual de los jóvenes. En un mundo cada vez más dominado por la superficialidad y la gratificación instantánea, el Papa insta a regresar al compromiso contemplativo y reflexivo que exige la literatura.
Finalmente, el Papa Francisco concluye recordándonos que la literatura no es sólo un esfuerzo privado sino comunitario, capaz de unir a las personas a través del tiempo y el espacio. Es un regalo que debemos compartir y, a través de él, podemos contribuir al florecimiento de la humanidad. La carta sirve como un llamado a reconocer y abrazar el poder transformador de la literatura en la formación permanente de los individuos y la sociedad.
¡La versión completa de esta carta se puede encontrar aquí!